Cerramientos para darle una nueva vida a tu terraza

Cada vez es más habitual encontrar viviendas con balcones o terrazas acristaladas o integradas totalmente dentro de la casa. Plantearte hacer un cerramiento es una gran decisión que te traerá muchas ventajas si no le estás dando a tu terraza o puertas de PVC todo el uso que te gustaría:

  • La principal ventaja es que podrás disfrutar de ese espacio de tu hogar los 365 días del año.
  • Además, instalar una cristalera va a proporcionar más luminosidad a la casa y sensación de amplitud.
  • Vas a ganar en metros, por lo que puedes hacer una redistribución de las estancias.
  • Conseguirás un mejor aislamiento térmico y acústico, lo que te proporcionará más confort e intimidad.

Antes de empezar con las obras, debes tener en cuenta unas cuestiones previas: el diseño que vas a elegir, los materiales que vas a utilizar, cómo vas a decorarlo y, finalmente,  los permisos de obra que debes pedir.

Diseño del cerramiento según el uso

El primer paso es decidir qué uso se le va a dar a esos metros de terraza: si la intención es tener una terraza abierta en verano y poder seguir disfrutando de ella en invierno o, si por el contrario, la intención es convertirla en un lugar totalmente distinto.
Existe una gran variedad de opciones según el diseño que tengas en mente y serán necesarios unos materiales concretos para cada opción.

Si la idea es que sea un espacio fijo, puedes optar por un cerramiento de ventanas de aluminio o de PVC plegables, practicables u oscilobatientes.
Si quieres tener un balcón o terraza cerrada en invierno, pero poder disfrutar del calor y el sol en verano, entonces puedes elegir ventanas correderas o una estructura con apertura plegable.
También existe la opción de instalar techos de cristal móviles o abatibles que ofrecen todavía más luminosidad.

Estilo y decoración para tu cerramiento

La mejor parte de toda esta aventura es decidir qué estilo le vas a dar.
Si has decidido mantener su función original pero quieres disfrutar de este espacio tanto en verano como en invierno, puedes decantarte por varios estilos:

Estilo nórdico
Es una de las tendencias más demandadas en decoración por su sencillez y belleza. Una combinación de colores fríos con detalles vintage y geométricos, plantas naturales y, en ocasiones, un toque minimalista.

Estilo boho
Explosión de color. Estilo libre, con mezcla de tendencias: bohemio, hippie, vintage. Colores cálidos y gran presencia de detalles étnicos. Las flores también tienen mucho protagonismo.

Estilo mediterráneo
También conocido como estilo ibicenco, consiste en recrear un espacio chill out que recuerde a los colores de los pueblos mediterráneos: el blanco y el azul. Cojines blancos y toques marineros como el estampado de rayas combinados con madera oscura.

Si, por el contrario, has cambiado la funcionalidad de este espacio y lo has integrado en la vivienda, es momento de convertirlo en tu estancia favorita de la casaPuedes emplear esos metros de más para crear una nueva zona para lo que necesites. Una idea podría ser utilizar toda esa luz que entra para las reuniones familiares creando una sala de estar o una zona de comedor o aprovechar para poner orden en tu armario y crear un amplio vestidor.

Permisos de obra

Una vez ya tengas claro el diseño de tu cerramiento y, antes de embarcarte con las obras, es necesario pedir los correspondientes permisos de obra.
Si vives en una comunidad de vecinos, debes informarte de qué dicen los Estatutos de la Comunidad de Propietarios acerca de los cerramientos. Las modificaciones en la fachada del edificio son asuntos a debatir entre los vecinos y necesitarás su aprobación unánime.
Además de consultarlo con los vecinos, deberás pedir una licencia de obra en el Ayuntamiento, que se te concederá si tu cerramiento va acorde con la Normativa Municipal.

Cuando dispongas de todos estos derechos legales, ya podrás proceder al cerramiento de tu balcón.

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